12 enero 2007

Libro: Las Cenizas de Ángela

Las Cenizas de Angela ( Frank McCourt.) Ángela nació entre Nochevieja y fin de año en Limerik un pueblo de Irlanda. Al cumplir la mayoría de edad es enviada a América con dos primas. Es la época de la gran Depresión. Al poco de llegar a Nueva York conocería en una fiesta a Malachy McCourt, un hombre nor-irlandés y alcohólico. que se convertiría en su marido. La vida de Angela tras esta boda empeoró ya que Malachy se gastaba el poco dinero que ganaba, en visitar las tabernas. En 3 años tuvieron 5 hijos y su regreso a Limerick, tras las dificultades de encontrar empleo, no fue ni mucho menos un bálsamo en sus vidas. Vagando de casa en casa y viviendo de la beneficiencia, Malachy no era capaz de mantener ningún trabajo mucho tiempo y cuando lo tenía, cada viernes, al percibir su salario semanal, se lo pulía consumiendo cerveza negra y cantando canciones nor-irlandesas, mientras su familia se moría de hambre y tenía que recurrir a la caridad. Llegaba a casa de madrugada y borracho levantaba a los niños y les hacía cantar canciones de protesta contra los ingleses. Malachy se sentía un luchador por su patria y contra la opresión inglesa, y trataba de inculcar ese orgullo así como el odio a los ingleses, a sus hijos. Frank cuenta en primera persona su miserable vida en Limerick, donde creció sin el cariño familiar de de su abuela y tíos maternos por ser hijo de "uno del norte, tierra de protestantes" Malachy intentaba mantener su dignidad negándose a recurrir a la caridad que le permitierala subsistencia de sus hijos, y mientras Ángela, hacía uso de la misma, en contra del criterio de su marido, para poder dar de comer algo de pan y en el mejor caso un huevo duro a sus hijos. Lo biberones de los bebés eran de agua con azúcar y pronto fueron víctimas de mortales enfermedades. Casi nunca tenían dinero para comer y su ropa, por que sólo tenían lo puesto, estaba roída y vieja. Frank cuenta esta desgarradora historia, pero lo hace como un niño lo haría, sin resentimiento, llamando a las cosas por su nombre y descubriendo él sólo la dureza de la vida sin la ayuda de un padre, cuya única preocupación era beber y cantar por Irlanda La integración escolar es también complicada al correr por sus venas sangre nor –irlandesa, algo que maestros y alumnos no olvidan. Tras una prolongada enfermedad descubre a Shakespeare y su pasión por la lectura. Frank lucha por subsistir y muestra un importante coraje para luchar. La vida es dura para un chico como él, que ha de ayudar a su madre y a sus hermanos pequeños, que ha de trabajar y luchar para intentar alcanzar su sueño: reunir dinero para volver a América y salir de la pobreza miserable en la que vive. Frank nos detalla la rigidez religiosa de la época en la que vive, y su total desconocimiento en su etapa de pubertad. Acepta los trabajos mas duros y variados con tal de poder dar de comer a sus hermanos y poder comprar toffe en la tienda de comestibles y en el mejor de los casos poder asistir a una sesión de cine, donde el sueño americano le anima a seguir luchando. La descripción del ambiente y los personajes paupérrimos de Limerick es una obra de arte. Uno se siente trasladado a esos barrios marginales infectados de roedores y pulgas y donde la solidaridad de los personajes, que dan lo que realmente no tienen, hace no perder la esperanza en la humanidad. En frente los barrios lujosos, en los que cada día hay algo para cenar, a los que Frank admira pero por los que no siente ningún resentimiento. Es una biografía dura, porque dura es la vida del protagonista, pero al mismo tiempo la simplicidad del lenguaje y el coraje del protagonista son un ejemplo de la lucha por la supervivencia en las condiciones mas adversas., donde se pone de manifiesto también la belleza y el amor. Magnífica biografía, con una gran escritura, (Premio Pulitzer) Es un libro imprescindible, es un libro que hay que leer